La gastronomía es una ciencia de combinaciones, mezclas, ensayo y error. Aunque sobre gustos no hay nada escrito, los ingredientes y matices de sabor que aporta cada producto hacen que sea más probable, y más sabroso, encontrar ciertas uniones de ingredientes. Conexiones de productos que se potencian mutuamente y que dan pie a recetas ilustres por su sinergia y resultado redondo. Por supuesto, cuando buscamos elegir aceite de oliva para gazpacho, la variedad y características también importan.

El gazpacho, una de las grandes estrellas de la gastronomía española y andaluza, basa su éxito en la calidad de uno de sus ingredientes principales: el tomate. Y, al igual que con los aceites de oliva, el tomate es un universo en sí mismo. Temporadas, variedades, notas cítricas, tonos dulces, ácidos, suaves, intensos… Un mar de sabores y matices que al otro lado del escaparate, en el estante de los aceites de oliva, encuentra parejas para cada una de sus tipologías.

Si un buen tomate es importante para el gazpacho, el aceite no lo es menos. Un buen gazpacho requiere sí o sí de un buen aceite de oliva virgen extra. Pero, en función del estilo que queramos preparar, la elección del mejor aceite de oliva para gazpacho dependerá de los ingredientes utilizados.

Como consejo general, a la hora de elegir aceite de oliva para gazpacho suele recurrirse al Cornicabra. Aunque a la hora de llevarlo a la práctica muchas familias optan sencillamente por el que tengan a mano, buscar la variedad específica hará que los sabores se intensifiquen y multipliquen. Aun así, aunque pueda utilizarse como regla genérica, también conviene bajar al detalle y buscar en cada nota y en cada gama a su pareja ideal.

Ese Cornicabra casi universal, con sus notas fritadas y suave y agradable picor, puede ser una pareja idónea para un gazpacho elaborado a partir de tomates rosados. Su sabor exquisito, intenso y con tonos dulces es un matrimonio gastronómico casi imbatible en una receta tan sencilla y la vez tan cargada de complejidades.

Otra de las variedades estrella, los tan de moda tomates Raf, destacan por su dulzor y suavidad. Aunque no es uno de los tomates más utilizados para gazpacho, sus características también casan a la perfección con esta receta, que tiene en el Arbequina la horma de su zapato. Un aceite de oliva para gazpacho lleno de aromas, suave y con esas características notas de plátano y manzana que llenarán un tazón de gazpacho de sabor y misterio.

Aunque las combinaciones ideales son una cuestión subjetiva, estas parejas pueden funcionar a las mil maravillas. De la misma manera lo haría un buen aceite Hojiblanca para tomates en rama, un aceite Picual con tomates pera o con tomates canarios.

La mejor idea para encontrar el aceite de oliva para gazpacho perfecto es, al igual que en el arte culinario, probar: cada paladar encontrará matices distintos a combinaciones idénticas, cada comensal disfrutará más unas mezclas que otras y cada mente pensante podrá descubrir nuevas recetas con las que deleitarse, tanto en gazpachos clásicos como en otros más rompedores como los de almendras, sandía o fresas. La clave es disfrutar del proceso. Y si es con el aceite de oliva virgen extra SELMA Millenary Olive Oil, tendrás mucho ganado al respecto.