Si hay un hecho que ha condicionado la popularidad del aceite de oliva virgen extra, es la baja calidad nutricional de sus competidores. Ya analizamos en una comparación pasada las diferencias entre el aceite virgen extra y el aceite de oliva normal. A pesar de tener una gran cantidad de similitudes entre ambos, como confirmaba Juana Ortega, presidenta de la asociación Tierra de Olivos, el AOVE contiene ciertos elementos que le otorgan ese sello de calidad.

En esta ocasión, queremos dar un salto algo más grande y establecer una comparación entre el aceite de oliva virgen extra y el aceite de girasol. Diferentes formas de utilización, propiedades de cada uno, maneras de conservarlo, entre otras cosas.

Aunque ha aumentado el consumo del AOVE, hay muchos casos en los que el aceite de girasol sigue siendo uno de los protagonistas en varias cocinas. Por ejemplo, ¿quién no ha visto freír en la cocina con aceite de girasol? Uno de los usos más comunes.

En este post, intentaremos aclarar cada una de las diferencias entre estos tipos de aceite, resaltando los beneficios o ventajas a la hora de utilizarlo y comparándolos al finalizar.

¿Cuáles son las características del AOVE?

En varias ocasiones hemos comentado que la gran incidencia y principal valor del aceite de oliva virgen extra es el beneficio en nuestro organismo. ¿Recuerdas por qué?

• Constitutido por 99,9 % de grasas y de origen vegetal, posee grasas de calidad que ayudan a proteger la salud.

• Uno de sus elementos protagonistas es el OMEGA 3, elemento básico de ácido graso en nuestro sistema.

• Su poder saciante, causa por la que se incluye en la mayoría de dietas saludables, evitará esos pequeños atracones a deshoras.

• Mejor usar el AOVE al natural, si lo manipulamos a ciertas temperaturas puede perder ciertas propiedades.

Estas características las cumple cada uno de los ejemplares de SELMA Millenary Olive Oil, con su compromiso por ofrecer la máxima calidad a sus clientes.

¿Cuáles son las características del aceite de girasol?

Considerando ambos productos como un bien nutricional, las características del aceite de girasol son bien diferentes a las del AOVE.

• En el aceite de girasol predomina las grasas polinsaturadas.

• A pesar de que ambos prefieren no llevarse a temperaturas altas, las grasas poliinsaturadas tienen más facilidad para oxidarse.

• El OMEGA 6 es el principal ingrediente del aceite de girasol, del que se recomienda un menor consumo.

• El aceite de girasol es perfecto para la elaboración de salsas, como la mayonesa.

Una vez establecidas sus principales beneficios, ¿qué conclusión podemos obtener de estas diferencias?

El consumo de aceite de girasol ha sido común en la mayoría de cocinas. Principalmente por su precio, más barato frente al AOVE, y sus funciones más clásicas: freír, preparar salsas, etc.

Las tornas están cambiando y el consumidor se atreve a adquirir el AOVE gracias al equilibrio y variedad de marcas accesibles.

Por supuesto, siendo beneficiosos ambos, es el aceite de oliva virgen extra el que posee mayores beneficios y más saludables que el aceite de girasol.

Estas características y propiedades las cumple cada uno de los ejemplares de SELMA Millenary Olive Oil, en su compromiso por ofrecer la máxima calidad a sus clientes.